Discriminación y persecución laboral en Mina Pirquitas

Un grupo de representantes de comunidades aborígenes y trabajadores de Mina Pirquitas denunció recientemente situaciones de discriminación y persecución laboral en esta localidad, apuntando al área de Relaciones Comunitarias de la empresa Mina Pirquitas y al Comisionado Municipal Francisco Trejo.

Marcelino Flores, uno de los representantes de los vecinos y trabajadores, expresó que “lo que vivimos se debe al accionar de este Departamento de Relaciones Comunitarias, que conduce Adriana Ruggeri, ya que constantemente nos cuestionan, nos perjudican, no nos permiten expresarnos libremente, no nos dejan trabajar o solicitar lo que nos corresponde, siempre hay cuestionamientos, y hasta quizá sean atacados nuestros hijos o quienes están trabajando. Los compañeros mismos no tienen derecho de expresarse y queremos que nos escuchen”.

En este sentido, agregó que “desde la Comisión Municipal de Mina Pirquitas lamentablemente en este momento estamos viviendo una situación de persecución. No entendemos de qué forma Francisco Trejo quiere conducir la misma. Con su accionar está parcializando o dividiendo a las comunidades, no tenemos derecho de expresarnos, y es por todo ello que expresamos que estas dos personas son culpables de la situación. Incluso despidieron a un trabajador solamente por cuestiones políticas y eso no debería ocurrir. Allá, si tenemos que elegir una Comisión de Centro Vecinal, por ejemplo, se digita todo desde este Departamento de Relaciones Comunitarias junto al Comisionado. Como comunidad no tenemos el derecho de elegir a nuestros representantes; todos tenemos derecho de expresarnos y elegir a nuestros representantes y no es para que, en este momento, nos marginen. Pensamos que no es así, de otra manera no estaríamos en Democracia. Pasaron las elecciones y siguen las provocaciones; eso es lo que nos molesta. La situación no es buena”.

A su vez, Juan Carlos Llampa sostuvo que además de todas estas situaciones también se vive una especie de “persecución laboral” en la localidad, agregando que “la persecución laboral se percibe en el caso de Daniel Casimiro, quien fue despedido injustificadamente. Creamos una dirigencia en Pirquitas, un sector político denominado “Juventud de Pirquitas”, el cual tenemos todo el derecho de instrumentar como ciudadanos en Democracia, y ellos lo despidieron para quitarnos el valor de accionar. Esto hace la gente tenga miedo, los intimidan de esta forma, sacan a una persona de la empresa para que los demás no nos voten. La gente quedó con temor y no participa, no apoya porque corre el riesgo de perder el trabajo. Mucha gente creyó en nosotros, pero se presiona a comunidades enteras amenizándolas diciendo “si no ganamos en tal parte es culpa de ustedes y aténganse a las consecuencias”.

“No somos los malos de la película ni los anti mineros”, añadió Llampa; “somos personas que quieren trabajar para bien de las comunidades, para que tengamos todos los beneficios, pero manejan todo entre cuatro o cinco personas desde el área de Relaciones Comunitarias. Consideramos a esta señora una persona no grata y tendría que estar fuera de la empresa o del área, porque ya no podemos soportar esta discriminación y persecución laboral hacia todas las personas”.

Sobre las razones por las que habría sido despedido, Daniel Casimiro comentó que “en su momento recibí el despido en un período de descanso expresándome que ya no reunía las condiciones para formar parte de la empresa, aunque ya había estado trabajando. Lo hicieron luego de las elecciones y no justificaron nada. Salieron a decir que no respetaba a los jefes pero, a la hora de la verdad, cuando solicité que se acercaran los representantes y expresaran claramente cuáles fueron los motivos nadie se acercó a explicarlos. Están tratando de justificar el despido”.

Acerca de las acciones que se llevarían a cabo en los próximos días, Llampa comentó que “no vamos a parar hasta que no retomen a los trabajadores que despidieron. Hoy sus familias están pasando un mal momento de necesidad y no vamos a parar hasta las últimas consecuencias. Tenemos previsto presentar un petitorio en Pirquitas para que nos den una respuesta y, de no obtener respuestas favorables, tomaremos otro tipo de medidas”.

Fuente: Periódico Lea